La sesión se planteó como si se tratase de una chica de los años sesenta que súbitamente se encuentra en un ambiente actual, contemporáneo y por lo tanto, algo perdida. Me interesaba destacar la ropa y el look de aquellos años y contraponerlo con una arquitectura moderna, de metal y brillos, o pasajes oscuros. Un retrato urbano, con algunas referencias a la pintura de Edward Hopper. Personajes femeninos envueltos en el misterio, rostros pausados aguardando algo que nunca llega…
Esquema de iluminación 01
Trabajé en exteriores con luz natural pero se hizo imprescindible utilizar luz de flash para disminuir el contraste de la escena. Contaba solo con dos horas de tomas pues a esta altura del año, en Barcelona, anochece a las 19 horas y las fotos comenzaron a hacerse a partir de las 17 horas. La idea era trabajar con un equipo de iluminación mínimo, portátil, pero suficientemente potente para poder realizar las fotografías con eficacia y sin sorpresas.
Para ello decidí utilizar el Godox AD300 Pro ya que me habían hablado muy bien de este flash. Es muy compacto, a máxima potencia permite realizar 320 destellos de flash, con una velocidad de recarga de 0,01s en su potencia mínima, hasta 1,5 segundos en su potencia máxima. También introduce el control de salida de potencia mínima de 1/256, incrementos en forma 1/10, y el disparo en HSS hasta 1/8000 de segundo que lo hace perfecto para retrato en exteriores.
Como no quería que la iluminación que fuese muy dura, utilicé una ventana parabólica, también de Godox, la AD-S85W, que resultó ser muy eficaz para el resultado que estaba buscando. Su forma de parábola profunda es una de sus características importantes. Esta forma permite controlar con precisión dónde cae la luz. El tranceptor de radio Godox X-Pro también resultó ser muy útil y ningún disparo falló en toda la sesión. Desde allí pude modificar con facilidad la potencia de la luz necesaria para cada disparo.
En cuanto a la temperatura de color, el flash respondió con gran eficacia sin generar cambios de color, a pesar que la luz natural iba aumentando su temperatura de color con el paso de las horas. Esto permitió mantener constantes los tonos de piel durante toda la sesión.
Volviendo a la intención de esta sesión de fotos, el tratamiento cinematográfico de las escenas y el empleo de la luz fueron los principales elementos diferenciadores de esta serie. Los lugares públicos vacíos subrayan la soledad del personaje representado. También busqué acentuar el efecto dramático a través de los fuertes contrastes de luces y sombras.
Esquema de iluminación 02
Esquema de iluminación 03
En los cuadros de Edward Hopper, el tiempo no pasa. Parece detenido, condensado en una eterna espera donde los rostros femeninos aguardan pacientes, envueltos en un aire enigmático. Sus figuras quietas y expectantes en lugares públicos hacen que se potencie una soledad enriquecedora y misteriosa gracias a esas escenas, a esos colores y esa atmósfera inquietante. Los personajes quedan contenidos así, en escenarios de tránsito.
Esquema de iluminación 04
Son escenarios urbanos donde las personas quedan diluidas en la espera, en esa mirada introspectiva que anhela quizá algo que ya no va a volver. Éstos espacios, que están mas allá del ámbito familiar, se constituyen en viajes en el tiempo.
Kimonoff es una nueva marca de kimonos “de entre casa”. La idea es sustituir al clásico albornoz por una prenda más elegante, informal y con un estilo inspirado en un kimono. Como no se trata de una prenda para salir de casa, la idea fue realizar la sesión en una vivienda. Quise contrastar la elegancia y colorido de las telas, con el ambiente antiguo de un edificio clásico del Barrio Gótico de Barcelona.
Para las primeras fotografías de cuerpo entero decidí montar un set de luces en el descanso de la escalera. Para este set monté una sola fuente de luz ya que quise emular la luz de la ventana real que había en el espacio de la escalera.
Dado la hora del comienzo de la sesión, no llegaba luz natural directa a la escalera por lo que utilicé un flash Godox Witstro 360. Éste flash, a pesar de ser muy pequeño, tiene una gran potencia y la posibilidad de utilizarlo con batería, lo que facilitó enormemente el montaje en la escalera, al no tener que buscar enchufes donde conectar el flash. Me gusta mucho éste flash pues la lámpara de destello está fuera de la carcasa del flash lo cuál es muy bueno cuando queremos utilizar un accesorio de luz suave ya que la luz se distribuye uniformemente dentro de la caja de luz.
Para poder conseguir una luz suave pero muy dirigida hacia el rostro de la modelo utilicé un accesorio parabólico. La parábola tiene la propiedad de rebotar la incidencia de la luz de forma paralela. No es tan direccional como lo puede ser un accesorio con lente Fresnel (que ya lo he comentado en algún post anterior) pero justamente ésta característica es la que necesitaba para ésta sesión.
La parábola PL90 de Godox cumple estos requisitos muy bien y es muy fácil y rápida de montar además de contar con unos acabados muy buenos y ocupar poco espacio a la hora de plegarla.
El segundo set se montó en una habitación con una puerta de doble hoja que daba a un balcón cerrado muy luminoso, con plantas. Utilicé la cortina blanca traslúcida de la habitación como fondo y dejé traslucir las ramas de la planta que estaba en el balcón. Como la luz natural no tenía suficiente intensidad, coloqué un segundo flash en el balcón iluminando una pared blanca lateral y el rebote de la luz sobre ella perfiló la transparencia de las ramas.
Esquema de iluminación II
Como luz principal coloqué la misma ventana que utilicé en el descanso de la escalera, pero esta vez de forma levemente lateral oblicua para lograr una iluminación plana con algo de volumen. En este tipo de sesiones es fundamental disponer de una carta de color Color Checker para garantizar la reproducción fiel de los colores de las prendas una vez que se procesa el archivo Raw en Capture One u otro programa de edición similar.
Por último, monté en el salón del piso el último set con una cortina en tonos ocres oscuros que contrastaba muy bien con algunos de los kimonos. Mantuve la iluminación principal y en este set también utilicé un segundo flash en el balcón para generar algo de contraluz en las tomas y lograr cierta transparencia en la cortina.
Esquema de iluminación III
La sesión ya había acabado, cuando encontré unos cojines “puff” muy dorados en el salón. Decidí realizar algunos planos cortos de la modelo pero en este caso trabajé con una ventana “strip” para lograr cierto degradado en el brillo y algo de volumen en la cara.
Siempre me han atraído los años cuarenta, su música y el estilo en la moda. Unos años antes había aparecido el swing en los grandes salones de baile pero en los cuarenta desaparecieron los grandes salones y la música ocupó su lugar en pequeños clubs que daban cobijo a pequeñas formaciones. No fue una época muy feliz, con la llegada de la Segunda Guerra Mundial, y ésta tuvo consecuencias que afectaron todos los aspectos de la vida. Las fajas se hicieron escasas por el racionamiento del caucho durante la guerra. Las mujeres usaban peinados con más estilo, como una manera de mantenerse a la moda más allá de la escasez de telas. Debido a que los cortes eran caros y el cabello corto era difícil para atar en el trabajo, usaban el cabello largo.
Quise hacer una sesión de fotos con este estilo e indagar en la iluminación que me pareciese mas adecuada. Ya en los años 40 el gran George Hurrell contribuyó de manera significativa a la fotografía de glamour, pero en aquellos años se trabajaba con luz continua y accesorios que por lo general producían una iluminación muy dura. La lente Fresnel era lo mas utilizado y el esquema habitual de iluminación era el “Paramount” o “Butterfly”, que producía una sombra muy dura por encima de la comisura del labio superior en forma de mariposa y contribuía a “afinar” la fisonomía de la modelo.
¡ Y aparecieron los Profoto B2 off-camera flash ! … y no pude resistir la tentación de probarlos. Si bien los B1 son una maravilla que no pensé pudiesen superarse, los B2 se han convertido en el complemento ideal cuando se trata de “ir ligero de equipaje”. Desde que apareció el Profoto B1 me preguntaba ¿ que más se puede inventar ? ¡ Y desde hace unos días contamos con los fantásticos B2, pensados también para el concepto off-camera flash ¡
Tuve el privilegio de ser uno de los tres fotógrafos a los que Profoto, a través de su distribuidor en España, InnovaFoto, le permitió probarlos antes de salir al mercado mundial, hace unos 10 días.
Hace un tiempo había contactado con una diseñadora de moda vintage, inspirada en los años 30, 40 y 50, con una colección muy bonita de prendas. Le gustó la idea de colaborar en este test de los Profoto B2 y nos pusimos a buscar una buena localización para realizar la sesión. Encontramos en Barcelona un estudio de alquiler que había sido un taller mecánico y que lo habían mantenido con sus mesas de trabajo y sus habitaciones originales. Es un lugar semi abandonado que perfectamente podía parecer de un tiempo lejano.
En los años cuarenta, nace el cine moderno. Por un lado, el cine medita sobre su identidad y la de sus personajes, claramente visible en “Citizen Kane” de Orson Welles. Por otra parte, el cine con actores naturales, da inicio al neorrealismo de la mano de Rosellini. Ésta idea de darle más importancia a los sentimientos de los propios personajes que a la composición de la trama, siempre me ha parecido una exaltación de la tragedia frente a la comedia.
“Citizen Kane” de Orson Welles
Así que decidí hacer una sesión de fotos donde dos personajes viven su identidad de manera solitaria, a la vez que interactúan fugazmente. No hay trama en la serie de fotos, solo la intención de un juego sutil entre los personajes. Para la producción tuve la suerte de contar con un equipo fantástico, muy fan de aquella época. El maquillaje y los peinados, eran muy importantes en éstos años y el equipo de colaboradores supo hacer lo suyo a la perfección.
El B2 de Profoto
“Separar el flash de tu cámara es el primer paso para convertirte en un gran fotógrafo”. Esta frase está en un catálogo de la marca y no puedo estar más de acuerdo con este concepto de “off-camera flash” … ¡ cuando mi blog de técnicas de iluminación se llama así !
Profoto B2 off-camera flash
La sesión fue breve pero con tiempo suficiente para probar los B2. El B1 ya tenía lo mejor de un flash de estudio y uno de reportaje, pero seguía siendo voluminoso como un flash de estudio. Para mi ésto no es un problema pues estoy acostumbrado a trasladar mis flashes de estudio a una localización. Pero a veces, necesito algo más pequeño, compacto, porque la potencia del flash no es lo fundamental para algunas fotografías que hago. El retrato editorial necesita centrarse en el personaje y solo sugerir el contexto donde se han hecho las fotos. El día a día de mi trabajo es para revistas que me piden éste tipo de retratos.
Con los B2 puedo resolver éstos encargos con gran facilidad y eficacia. Casi nunca realizo retratos con un diafragma menor a f5,6 pues pongo en riesgo el foco sobre el rostro. A su vez, éste diafragma me permite aislar al sujeto del fondo si utilizo una focal larga y darle contexto al retrato si utilizo una focal ligeramente angular. Por otra parte, al utilizar un diafragma f5,6 puedo aprovechar parte de la luz ambiente de la localización, si trabajo un ISO moderado de 400 y una velocidad de 1/30. Para no correr riesgos, suelo utilizar un trípode y la complicidad del sujeto, que no se mueve durante la toma. Pero también hay que decir que el B2 es entre 5 y 10 veces más potente que un speedlight de potencia media, a la vez que está capacitado para superar al sol en un día soleado y para iluminar fondos y áreas de gran tamaño.
Profoto B2 off-camera flash
La antorcha B2 es pequeña y suficientemente ligera para poner en un soporte de cámara. A máxima potencia, el B2 recarga en 1.35 segundos, con una rapidez que siempre ha sido el sello de marca de Profoto. A bajas potencias, produce hasta 20 flashes por segundo, lo cual elimina el riesgo de perder esa toma perfecta esperando el flash. Y la funcionalidad High-Speed Sync (HSS) da un control total de la luz disponible.
Batería asimétrica para dos antorchas
Por el tipo de fotografía que suelo realizar casi siempre trabajo en Manual. ¡Y he comprobado que a plena potencia supera las 200 disparos! También lo he probado en TTL y el comportamiento es magnífico, además de ser asimétrico al 99%. ¿Que más se le puede pedir? ¿Luz de modelaje? ¡Tiene una luz led muy luminosa que dura 90 minutos encendida! Y es compatible con todo el sistema Profoto de accesorios.
La iluminación
Utilicé en un principio el paraguay Brolly de Photek, un accesorio que utilizo con frecuencia para mis retratos editoriales, con el que me gusta mucho trabajar. Pero por su tamaño, 150 cms de diámetro, ilumina una superficie muy grande. Para la primer toma fue muy eficaz, pero luego decidí utilizar una ventana pequeña de Profoto que resolvió la iluminación que la sesión necesitaba.
Profoto softbox 2,3 octa
Buscaba una luz intimista, suave y envolvente y ésta ventana lo resolvió muy bien. En otras tomas, aproveché en parte la luz ambiente del estudio cuando me dí cuenta que tras una cortina de gasa muy fina se dibujaba un contraluz difuso y cálido que aproveché posicionado el flash en un Ratio 0 respecto a la luz ambiente. Como dije antes, no necesité mucha potencia ya que solo buscaba que el ambiente quedase sugerido.
Por último quise que las modelos interactuasen de alguna manera leve y realicé algunas tomas de ambas en la misma foto. En un rincón del estudio había una bañera de losa esmaltada antigua y un pequeño foco de tungsteno sobre ella. Daba un ambiente muy bonito de luz, pero la potencia no era suficiente para realizar una fotografía correcta, a un ISO bajo.
Situé el B2 cerca de la luz del pequeño foco de tungsteno y la “apantallé” con una cartulina negra para que el flash no llegase al reflector del foco. El contraste era alto y para reducirlo coloqué la ventana Octa de Profoto como luz secundaria, unos tres EV por debajo de la potencia de la luz principal.
Y así, con el apoyo de los Profoto B2 y un fantástico equipo, resolvimos la sesión en tres horas !
Modelos : Nathalia Paolini y Bel Llorens / Mot Models
Vestuario : La vie en swing
Estilista : Silvia Baltasar
Hair : Luchy Pin Up
Make Up : Eva Dent
Asistentes de fotografía : Álvaro Rodríguez y Clara Córdova
Video : Andreja Veluscek- Reya
Asistente de video : Marta Ribes
La idea de maleta, maletín, caja, siempre ha sido un tema que me interesó. Puede asociarse al viaje, pero también al misterio, la vida y la historia de una persona, los secretos, propios o ajenos y tantos otros significados. Una maleta abierta es una rápida radiografía de su portador. Una maleta cerrada, es puro misterio.
Sobre esta idea decidir realizar una sesión de fotos para probar los fantásticos flashes B1 de Profoto, que muy gentilmente me habían prestado la gente de Innovafoto a través de Nico Jódar. También colaboró en la sesión la empresa de alquiler de equipos fotográficos Aclam, quienes me prestaron la Canon 5D Mark III, cámara con la que quedé impresionado con los resultados.
Busqué una localización que fuese poco habitual, algo extraña para la modelo y que su vestuario no fuese acorde al lugar. En el barrio del Buen Pastor en Barcelona aún sobreviven un conjunto de pequeñas casas con una tipología poco frecuente en la ciudad. Unas semanas antes había ido al sitio para determinar la hora ideal para comenzar la sesión.
Los ejemplos cinematográficos o publicitarios en torno a la idea de misterio, viaje, maleta, caja, son tantos y tan variados, que los primeros que me vinieron en mente fueron dos vinculados a la gran actriz Catherine Deneuve. Un fotograma de una película emblemática de Luis Buñuel, “Belle de Jour”y muchos años después, una publicidad para Louis Vuitton realizada por Annie Leibovitz.
Para la producción tuve la suerte de contar con un gran equipo de colaboradores que hicieron que la sesión fuese fácil de llevar a cabo. Previmente habíamos desarrollado un Briefing de la sesión , además de dossiers de estilismo, make up y peinado.
El B1 de Profoto
Las fotografías se realizaron a última hora de la tarde, con lo que hubo que trabajar con rapidez ya que el tiempo de la sesión iba a ser muy breve y además hacía frío, era invierno. Necesité entonces un equipo que me permitiese trabajar con rapidez y eficacia. ¡ Los B1 de Profoto eran la solución !
El B1 tiene lo mejor de un flash de estudio y lo mejor de un flash de reportaje. Profoto no ha querido llamarlo de ninguna de las dos maneras y ha preferido hablar de este nuevo producto como de una unidad de “off-camera flash”. ¿Cómo no recibir este exclusivo flash con gran entusiasmo cuando mi blog sobre técnicas de iluminación se llama “www.off-camera-flash.com”?
Mi trabajo profesional más cotidiano se centra en el retrato editorial y publicitario y mi actividad docente también. Muchas veces no tengo tiempo de montar un equipo de iluminación con antorchas y generadores o necesito resolver la fotografía en poco tiempo y sin desplazar muchos equipos. En estos casos suelo optar por flashes de reportaje, con la limitación de no contar con una luz de modelaje o no tener suficiente potencia. El B1 tiene 500 W/s y un número de guía 96, que lo convierten en el mejor equipo ligero y sencillo para trabajar en localizaciones. La batería permite hasta 220 disparos por carga, con un tiempo de refresco inferior a 2 segundos a plena potencia o en el entorno de una décima de segundo a mínima potencia. La gran novedad es que trabaja en TTL, convirtiéndose así en el primer flash de estudio TTL del mercado, con sólo 3 kilos de peso.
Y por si eso fuera poco, otras aportaciones del B1 son que se puede usar en TTL con ratios de iluminación que no sean cero, permitiendo subexponer el ambiente respecto a la intensidad del flash o viceversa, modificando la compensación del flash desde la cámara; que posibilita trabajar en “Manual”, como lo he hecho toda la vida con los flashes de estudio; y que la nueva versión del accesorio Air Remote, necesaria para aprovechar este sistema bautizado como Air TTL, tiene un alcance de 300 metros.
Air Remote y B1 de Profoto
La iluminación
La luz del atardecer tenía una dominante cálida como es habitual cuando el cielo está despejado y solo necesité que el flash actuase en Ratio 0. Esto significa que el diafragma que me diese la luz ambiente debía ser el mismo que me proporcionase el flash y solo debía cuidar de utilizar una velocidad de obturación por debajo de 1/200, que es lo que me permite mi cámara, una Canon 1Ds Mark III. Como ambas luces llegaban a la modelo desde distintas direcciones, opté por utilizar un paraguas Brolly colocado en el B1 y de este modo evitar una doble direccionalidad cruzada y evidente de las sombras.
Este paraguas Brolly de Photek lo utiliza habitualmente Annie Leibovitz para sus retratos, como la sesión que realizó para Louis Vuitton de Keith Richards en una habitación de hotel. No es tan suave como una caja de luz Octa, pero tampoco actúa como un paraguas de rebote blanco. Da una luz suave, algo contrastada y es muy fácil y rápido de montar. Yo lo utilizo con muchísima frecuencia, tanto en sesiones de moda como retratos editoriales y publicitarios.
El sol iba descendiendo con gran rapidez y el tiempo nos quedaba muy corto para hacer muchos cambios de ropa. Como el sol ya se había ocultado opté por cambiar el esquema de iluminación. Ahora el flash actuaría como luz principal y la tenue luz del ambiente serviría de luz de relleno.
Esta vez situé el flash más lejos de la modelo para obtener un contraste de iluminación mayor que en la fotografía anterior y convertir así el Profoto B1 en la fuente de luz principal.
Cuando ya la luz ambiente era muy baja decidí realizar un tercer estilo de fotos, donde se intuyese cierta nocturnidad.
¡ Y así, con el apoyo de los Profoto B1 y un fantástico equipo, resolvimos la sesión en dos horas !
Modelo : Marta Cillero
Fashion Stylist : Angélica Marés
Make Up : Xabier Lasa
Asistentes : Raúl Florian Pérez Pérez, Lotta Dusse, Alba Rodríguez Núñez
Video : Andreja Veluscek- Reya e Iris Olivé
Podéis ver el video del “making of “ de la sesión en este enlace
Algunos trabajos fotográficos son verdaderamente difíciles de realizar en la era digital, y uno de ellos son las reproducciones de obras de arte. La fidelidad de los colores debe ser máxima y llegar a ellos es una tarea de alta precisión en toda la secuencia del encargo. Pero vayamos primero a la iluminación, que es de lo que se trata este blog. Al fotografiar una obra de arte – o cualquier otro motivo – nuestra principal preocupación en cuanto a la luz será su brillo, color y contraste.
Saúl Steinberg
Realizo con frecuencia las reproducciones de obras de arte para la Galería A34 de Barcelona, además de trabajar para otros clientes en este tema, como cuando realicé las reproducciones de la obra de mi querido amigo Yamandú Canosa para la Fundación Suñol o trabajé para el CCCB fotografiando los automóviles Pegaso.
Galería A34
Muchas obras están enmarcadas y el cristal se convierte en el principal problema. Debemos evitar ver los reflejos producidos y para ello es necesario detenerse en el concepto de «familia de ángulos que producen un reflejo directo».
Reflejo directo
La fotografía anterior nos enseña un reflejo directo. Aquí vemos reflejado sobre el cristal el reflejo directo que produce una de las cajas de luz que utilicé para realizar la reproducción. En éste sentido es muy importante que desde la posición de la cámara no veamos ningún reflejo directo de las fuentes de luces utilizadas para realizar la fotografía.
Familia de ángulos
Cualquier luz situada fuera de la familia de ángulos que produce reflejos directos de la fuente de luz, estará bien ubicada para comenzar a realizar el trabajo. Es importante posicionar la cámara alejada del motivo ya que si nos vemos obligados a colocar la cámara cerca de la obra, la familia de ángulos que producirá reflejos directos será mayor y nos obligará a poner la luz demasiado rasante al plano de la obra y las sombras del marco serán mayores.
Otro aspecto esencial es que llegue a la superficie de la obra la misma cantidad de luz. En este sentido es importante que la fuente de luz esté alejada de la obra para que la luz se distribuya de manera homogénea. La ley de la inversa del cuadrado de la distancia nos recuerda que a mayor distancia menor cantidad de luz y debemos evitar los degradados de luz sobre la pieza. Por otra parte los reflejos difusos se hacen más brillantes a medida que la luz se acerca a la superficie reflectante. Debemos intentar que las distancias a y b del siguiente dibujo sean lo mas parecidas posibles. En el excelente libro de Hunter, Biver y Faqua podéis ver este tema desarrollado con mayor extensión.
Si se trata de dibujos que no tienen relieve prefiero trabajar con cajas de luz grandes para lograr que las sombras producidas por el marco sean suaves y de bajo contraste ya que si el marco es muy profundo se verán de manera notoria y si la luz utilizada es dura no habrá transición entre las áreas en luz y sombra sobre la obra y será mas difícil de retocar en la post producción.Un detalle importante cuando las obras tienen cristal es colocar en el plano de la cámara una tela de terciopelo negro para garantizar que se absorberán todos los reflejos que podrían aparecer de la habitación en el cristal de la obra.
A veces tenemos suerte y las obras no tienen marcos con cristal, y si además fueron realizadas sobre papeles mate solo debemos poner bien la luz. Dos luces simétricas, equidistantes de la obra y con el mismo ángulo de incidencia, será suficiente. En mi caso suelo utilizar para éstos trabajos cajas de luz Wafer y flashes Bowens.
Joaquín Torres García
Recuerdo hace unos años realizar un reportaje sobre la exhibición de las obras de Keith Haring en el Whitney Museum de New York, donde no pude iluminar la obra y solo conté con una hora para el encargo. Las obras estaban muy bien iluminadas pero varias de ellas estaban realizadas sobre lonas satinadas. A veces no se puede hacer lo que uno sabe que debe hacerse y debe resolver el problema con los escasos recursos disponibles. En este caso opte por alejarme de la obra y buscar ángulos de toma que evitasen los reflejos directos, aunque no fue posible en todas las obras.
La gestión del color en la reproducción de obras de arte es un tema fundamental y en la era digital no es algo sencillo. En primer lugar habría que saber con que fuentes de luces se va a trabajar y generar un perfil para el sensor de la cámara y esas luces. En su día tuve la suerte que mi amigo Hugo Rodríguez lo elaboró para mi equipo cuando tuve que realizar unas reproducciones muy difíciles de la obra de Joan Miró. Parte de los tonos rojos y azules de sus obras se situaban fuera del espacio de color reproducible en una imprenta y había que saber que decisiones tomar al respecto en el tratamiento del color.
Éste tipo de trabajo implica disparar un «bracketing» de exposiciones, revelar el archivo raw con el perfil desarrollado y con una curva en respuesta lineal. En éstas circunstancias a su vez hay que hacer un balance de blancos y evaluar el mejor histograma resultante para su revelado. También habría que comparar los valores de la carta Color Checker Gretag Macbeth CGI con la carta real fotografiada teniendo en cuenta que ambas estén en el mismo espacio de color. El propósito de representación del color en el programa de revelados de los raws también es muy importante y escoger el histograma mas desplazado a la derecha también, ya que garantizará resolver el nivel de ruido en las texturas negras, una mayor separación tonal en las altas luces y un rango dinámico mayor. La elección del histograma correcto es algo muy bien desarrollado en el último libro de Hugo, Captura Digital y Revelado de Raw.
Carta Gretag Macbeth
También habría que evaluar los valores en un espacio de color Lab cuando se convierte la fotografía de RGB a CMYK, etc, etc. Todo este tema se escapa a la finalidad de este blog de iluminación. Hugo lo explica de manera brillante en sus diversos artículos sobre el tema, entre ellos en el artículo sobre la carta de color IT8 que desarrolló para los Laboratorios EGM de Barcelona, donde también cuenta como hizo el perfil de mi equipo.
Hace unos años la editorial belga Tectum me invitó a participar en el anuario de desnudos Nude Bible a consecuencia de haber visto mi trabajo en el libro Nudes Index I editado por Könemann.
Decidí participar en el nuevo anuario pero no con un par de imágenes sueltas sino a través de un proyecto mas extenso sobre el sexo y la parafernalia que rodea ciertas prácticas del erotismo. Casi todos mis proyectos de autor hasta entonces referían a mi niñez y un tema «adulto» no lo había abordado hasta entonces. Una de las referencias que comenzaron a rondarme en la cabeza inmediatamente fue la obra del fantástico Helmut Newton, ídolo desde mi temprana juventud. También la obra de Jean Loup Sieff, Guy Bourdin o Bettina Rheims , entre otros, siempre han sido grandes influencias en mi fotografía. Finalmente decidí hacerle un homenaje a David Lynch y su emblemática serie Twin Peaks, icono de la televisión de los 90’s.
En aquella serie hubo un capítulo que me cautivó, era el tercero de la primer temporada titulado «El sueño de Copper«. En él, el policía Dale Cooper sueña con la chica asesinada, Laura Palmer, y un enano,The Man from Another Place. Todo en la escena parecía «from another place» y ese decorado fue el inicio de mi serie Stiletto.
Otro elemento importante en la obra de David Lynch es la música. En el caso de mi serie fue importante también una canción de Laurie Anderson, «Born, never asked», cuya letra habla de una enigmática cortina.
¡ Pero vayamos a la iluminación ! El presupuesto no me permitía comprar terciopelo rojo para el decorado y lo hice con una tela gris muy delgada a la que luego «teñiría» de rojo con luz. Lo mismo hice con el suelo, que se pintó de blanco, negro y gris para lograr sobre él el mismo efecto que en las paredes. La luz principal sobre las chicas era «blanca», de 5500 º Kelvin, y por ello fue necesario enmascarar esa luz y dirigirla solo hacia la modelo para que no quitase la dominante rojo que recibiría el decorado.
Se utilizó como luz principal un flash Bowens de 1000 W/s y para el fondo tres flashes Bowens de 1500 W/s con gelatinas rojas colgados desde el techo. La gelatina roja absorve mas de + 1 EV por lo que se utilizaron a máxima potencia.
En las fotos de planos amplios el suelo iba a quedar «desteñido» de rojo por la incidencia de la luz blanca principal por lo que sería necesario retocar luego con Photoshop. Ésto no era un problema ya que las capturas se hicieron con una Hasselblad con respaldo digital Imacon.
En el post anterior explicaba que el Image Fulgurator desde el punto de vista técnico cumple la misma función de un spot del tipo Zoom Spot 18-35 o un Mini Spot Lite, ambos de Elinchrom.
La particularidad de éstos accesorios es que cuentan con un elemento óptico – lente o condensador – que permite enfocar una imagen situada entre un flash y ese elemento óptico, que al dispararse se proyecta en un fondo o motivo. Éstos elementos que van «entre la luz y la óptica» se llaman Gobos (“GOes Before Optics” o “to go between”) y son metálicos. El catálogo de opciones es bastante amplio y suelen simular una persiana veneciana, follaje, estrellas, etc.
En una oportunidad los utilicé en una sesión para la revista Clara. Se trataba de realizar una portada a Araceli Segarra, mas un reportaje de varias páginas interiores con la idea de producir durante una temporada portadas con mujeres destacadas en algún ámbito profesional.
Los ambientes recreados para las fotografías no debían tener muchos elementos ya que cualquiera de las tomas realizadas podía ser la portada y debía dejar amplios márgenes para la cabecera y otros textos, cuya lectura no debía dificultarse con los elementos de la fotografía.
La idea era que pareciese un ambiente muy amplio, iluminado con luz natural. Para ello se utilizó una gran ventana Wafer con un flash Bowens 1500 y el contraste del ambiente se disminuyó con tres grandes reflectores de poliestireno expandido (Porexpan®, Telgopor®, Styrofoam®, Frigolit®, etc, etc). Sobre la cámara se situó un gran paraguas blanco que iluminaba a Araceli frontalmente a – 1 1/2 EV por debajo de la potencia de la ventana Wafer. Por último se utilizó un Zoom Spot 18-35 de Elinchrom adaptado (DIY) a una bayoneta Bowens para poder utilizarlo con otra antorcha Bowens de 1500 W/s. En el spot se colocó un gobo con dibujo de persiana veneciana.
Esquema de iluminación
La toma se realizó con película diapositiva EPP100 de Kodak. En el mundo analógico la exposición correcta y la relación de potencias entre los flashes es fundamental ya que la diapositiva tiene muy poca latitud (margen de error en la exposición) y cualquier fallo se hace difícil de arreglar. En cualquier caso hoy día con la tecnología digital también se hace necesario una exposición correcta ya que así tendremos luego los mejores resultados al procesar el archivo Raw.
Mi primer ventana fue «homemade». La hice hace 23 años con cartulinas blancas satinadas cortadas en forma de trapecio cuyos bordes estaban doblados y pegados sobre dos bastidores de madera unidos por un par de listones. Al conjunto lo atravesaba una varilla de aluminio redonda donde iba colocado un flash Nikon SB 10. Por delante tenía un plástico traslúcido unido al marco con Velcro™ .
Lo importante del «invento» era que interiormente se pareciese a una parábola ya que es la forma geométrica pura que mejor distribuye la luz. Y que fuese grande, ya que el «tamaño aparente» del flash aumentaría y con ello lograría una luz más suave que con el flash directo al sujeto.
También por aquel entonces desteñi una tela azul de algodón con hipoclorito de sodio de manera irregular para tener un fondo «llamativo».
No recuerdo con quien estrené estos artilugios, pero sí tengo muy presente que una tarde en el salón de casa, hice una sesión de fotos a Eduardo Galeano. Puro estilo ochentero !!